Paseando por el Montsec de Aragón

13 Feb, 2011 Por MAB

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Empezamos nuestro recorrido en la localidad de Viacamp. Visitando su antiguo torreón de comunicaciones estratégicamente situado, para que fuera visible desde muchos lugares. Se ha habilitado el acceso al mismo y contemplar el paisaje desde su atalaya resulta un espectáculo magnífico, lástima que el día salió algo gris y había algo de niebla en las cercanías. Además hacía mucho frío. Las manos se helaban, y pensábamos más en volver al autobús que en contemplar el panorama.

El primer tramo, desde Viacamp a Litera, lo recorrimos con el autobús, lo que nos pareció a todos una buena idea. En Litera nos pusimos las botas y empezamos literalmente a caminar por pistas primero y senderos después, y atravesando terrenos de labrantío y bosques. El Congosto de Montrebei estuvo, a modo de faro para desamparados, custodiándonos todo el día.

En un pequeño collado aprovechamos para desayunar y charlar un poco y luego nos acercamos a Mongay. Un pueblo abandonado con algunas casonas modernas que se empezaron a construir con mucho ímpetu pero que nunca llegaron a terminarse. Sólo hubo presupuesto para las estructuras y algunas paredes con elementos decorativos bonitos pero desubicados en el tiempo y en lugar.

En un punto concreto del camino encontramos restos de una «gran mariscada», como diría nuestro amigo Benito, y rebuscamos entre las numerosas conchas fósiles con el deseo de encontrar grandes ejemplares y bien conservados para la colección particular de cada uno. Estaban a flor de Piel.

El Torreón de Chiriveta, siguiente en la línea de vigilancia al de Viacamp, estaba peor conservado y no sólo no se podía subir, sino tampoco acceder a su interior. Cualquier día se caerá.

Comimos en la ermita de la Virgen del Congosto, ubicada frente a un precipicio desde el que se tienen una espléndidas vistas de Montrebei, y el que quiso se pudo acercar a los restos de un antiguo poblado, más parecido a parideras de pastores que a otra cosa, que estaba ubicado en una faja del terreno con accesos algo expuestos.

Terminamos en un área de descanso de la carretera de Viella, pero antes visitamos la abandonada localidad de Chiriveta, que a pesar de estar desahabitada, luce en su Plaza Mayor, (ahora plaza mayor), una enorme placa solar con pie adornado por figuras abstractas de forja, que si bien no podían convertir a la mona en princesa, si resultaba un elemento chocante en el entorno.

La jornada terminó con una buena chocolatada, a escote, en casa Bescós.